En Jesús, al lado de un Paisaje rural único de almendros e higueras y con vistas lejanas a Dalt Vila y al Mar, Emilio y Cristina me confiaron la ideación de su casa, y en el 2009, empezamos a trabajar juntos el proyecto de la vivienda, que ahora es su hogar.
Los lindes de la parcela siguen la alineación cartesiana de la calle, es una parcela muy regular, cuadrada y con orientación Sur-Oeste, en cambio las buenas vistas hacia el Mar y hacia Dalt Vila están girando un poco tu mirada al Sur, así que la casa se sitúa emproada al Sur y al Mar, teniendo la suerte de que las buenas vistas coinciden con la buena orientación a Sur.
La manera formal de valorizar esta coincidencia, vistas-orientación, fue diluir físicamente la esquina Sur de la casa, cerrando ese vértice-proa al sur, con dos vidrios dispuestos en perpendicular, sin perfilería, y trasladando el tradicional pilar de esquina a otro lugar cercano. Con ese gesto se acentúa la visión al exterior cercano, del jardín con su piscina infinita, y al exterior lejano, al paisaje rural colindante, a Dalt Vila, Al Mar, disfrutando así todo el día del cambio de la luz y color del cielo.
En la casa de Emilio y Cristina volvemos a trabajar con el trío Estar-Interior, Estar-exterior y cocina, pero ahora es la cocina la que se relaciona directamente con el porche, y el salón queda más recogido, a un lado, pero siempre abierto espacialmente, para que se cree una vida cercana entre ellos, los que habitan y disfrutan del sofá, de cocinar, de leer y descansar, o del simple hecho de contemplar.